Lavacolla, el aeropuerto central gallego que aspira a dirigir las conexiones internacionales de todo Galicia e incluso algo más tiene hoy por hoy una mala comunicación con el resto del territorio gallego.
Eso he dicho, no has leído mal. Pensemos en las comunicaciones actuales de Lavacolla: por supuesto la A-54, autovía construida para dejar a la ciudad de Santiago a un paso de su aeropuerto, y que en el futuro llegará a Lugo. A parte de esta autovía, cabe nombrar la carretera de 2 carriles (1 por sentido) que une Lavacolla con la N-550 a su paso por Sigüeiro, evitando tener que llegar hasta Santiago para ir al aeropuerto si llevas dirección Coruña. El resto de carreteras son sencillas vías vinculadas al paso Santiago-Lugo o Santiago-Curtis.
En cuanto al ferrocarril, el PXOM de Santiago reserva espacio para la construcción de una línea que enlace con el resto de ciudades gallegas, pero se trata de un proyecto caro y que o bien, el aeropuerto ejerce su papel central, o bien requiere un gran aumento de pasajeros para ser rentable.
Mirando esta situación, el aeropuerto no está mal comunicado, ya que por medio de la A-54 enlaza con el resto de ciudades gallegas. El problema viene en la desembocadura de la A-54. Conecta con la SC-20 y además en una rotonda. Esta comunicación es buena si pensamos en la conexión con Santiago, pero no con el resto de ciudades, ya que para ello hay que recorrer un par de kilómetros extras y utilizar la actual conexión norte con la AP-9, la cual está saturadísima debido al papel que ejerce este tramo como circunvalación en Santiago. De esta forma, no hay un enlace directo del aeropuerto con el resto de ciudades.
Según el
PXOM de Santiago, está prevista la construcción de un nuevo enlace Santiago-AP-9 en Sionlla, que daría servicio al gran polígono industrial que se pretende hacer. Este enlace sería una rotonda con el periférico oeste (planificado para la siguiente década) e incluiría un ramal que llegaría a la actual rotonda en San Marcos de la A-54. Con esto, quedaría una conexión hecha entre AP-9 y A-54, pero por medio de 2 rotondas y de un ramal, algo que para empezar depende de que finalmente el Polígono de A Sionlla siga ese plano y AUDASA permita ese gran tramo gratuito de la AP-9 en Santiago, que ejercería como un aumento de la circunvalación, soportando grandes cargas de tráfico.
La conexión A-54 con AP-9 ya es algo que debió pensarse cuando se construyó la autovía, y es algo que yo propongo como necesario para el aeropuerto en los próximos años.
AUDASA no debía tener mayor inconveniente, se trataría de un tramo mínimo entre este enlace y la conexión en San Lázaro, y además se trataría de una conexión utilizada principalmente por los vehículos cuya intención sería la de recorrer los tramos de pago en la AP-9 dirigiéndose al resto de Galicia, y nunca podría ejercer como circunvalación.
El enlace se realizaría donde ambas vía se cruzan, y la única complicación estaría en el enlace proveniente de aeropuerto con dirección Sur. Aquí muestro una imagen de mi propuesta (cliquea para ampliarla):
El enlace Sur-Aeropuerto es de lo más sencillo. El enlace Norte-Aeropuerto se realizaría sobre las vías del tren en forma de caracol. Los enlaces Aeropuerto con el norte y el sur, tendrían un mismo carril de deceleración: el que se dirige al norte sería muy sencillo, y el que se dirige al sur es el complicado. Requeriría pasar por encima de la AP-9 para luego descender y pasar bajo el viaducto de la A-54, y continuar descendiendo hacia un pequeño paso subterráneo bajo el caracol de deceleración, luego ascender y entrar en la AP-9. Para ello habría que modificar un poco los pilares del viaducto de la A-54 y para el descenso, requeriría abrirse un poco más o menos para permitir el paso de vehículos altos y no hacer gran pendiente, pero es posible (por ello dibujo diferentes alternativas de este enlace, la más abierta en rojo).
El coste no debía ser muy elevado, parte de estos terrenos figuran en el PXOM para ser expropiados. Es una zona con ausencia de asentamientos. El tiempo para construir esto, sería muy pequeño, apenas unos meses, el mayor tiempo se lo llevaría el diseño y demás papeleo. Ya el presupuesto, no manejo ese ámbito, pero no debería ser elevado mirando los presupuestos para la construcción de otras vias que incluyen enlaces, expropiaciones y la propia carretera.
Se trata de dotar al aeropuerto y su nueva terminal de comunicaciones adecuadas, rápidas y cómodas para todo el territorio.