miércoles, 9 de diciembre de 2009

Santiago se va adaptando a las nuevas luminarias

Aunque no tan rápido como en las películas ya antiguas que trataban el futuro como si en estos años ya tuviéramos coches voladores o colonias en la Luna y Marte, los tiempos avanzan y es increíble cómo un pequeño invento, en este caso el LED, puede revolucionar sectores tan diversos como las pantallas de televisión y la iluminación.

Las ciudades deben ir introduciendo cuanto antes la tecnología LED en sus calles para notar un sorprendente ahorro en energía eléctrica, eficiencia lumínica y, a su vez, adaptar las farolas para una menor contaminación lumínica.

En este sentido, Santiago no me parece de las ciudades más avanzadas, pero allí donde se ha hecho el cambio, la mejora es notable, tanto en visibilidad como en el propio ambiente nocturno de la calle, por no hablar de la contaminación lumínica.

El ejemplo que voy a mostrar está en la zona vieja, concretamente en la rúa do Vilar la cual, prácticamente como excepción en el casco histórico, ha eliminado las bombillas visibles en la farola por, entendemos, lámparas LED que distribuyen la iluminación de manera que se concentre en la calle y no se esparza (cristal plano) y proporcionando una luz blanca cálida mucho más agradable:



Por poner un ejemplo con el resto de la iluminación, aquí va una imagen de la rúa da Raíña, con esa luz anaranjada:



Creo que el cambio es notable y es algo que incluso debe imponerse en las carreteras mejorando en mucho la visibilidad y, desde luego, el casco histórico estaría mucho más encantador de noche con este nuevo haz de luz.

Un poco relacionado con el tema, os dejo una fotografía (no muy buena) de la biblioteca Ánxel Casal y la luz que aporta otrogando un excelente ambiente en Xoán XXIII:


2 comentarios :

  1. Pues yo pase por ahi y la iluminacion es escasisima...es de mas calidad en el sentido de que es blanco calido , pero deberia ser mas intensa..es demasiado debil

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  2. Pues yo lo veo muy bien iluminado, y aparte de su mejor tono (que permite apreciar mejor los colores) es una luz mucho más uniforme sobre el terreno.

    Yo creo que el problema es que estamos muy mal acostumbrados y también puede tener que ver el efecto de la iluminación en las fachadas. Con esta luz de menor contaminación lumínica las fachadas de los edificios quedan menos iluminadas (no es lo que hay que iluminar) y puede dar la impresión de menor luz en la calle, pero si prestas atención verás que observas cualquier esquina y a lo lejos cualquier cosa.

    Un saludo!

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